¡Cuidado con el oleaje! Este juego de equilibrio pondrá a prueba la habilidad de toda la familia. Consiste en colocar tantos pececitos como sea posible sobre el narval sin que se caigan. Coloca el gran narval sobre el balancín y, en grupo o tú solo, con mucho cuidado, apila los pececitos. ¿Conseguirás ponerlos todos antes de que se caigan?

Este juego es perfecto para desarrollar la coordinación mano-ojo y las habilidades motoras finas de los más pequeños, además de la creatividad y la percepción visual necesarias para ir apilando las piezas.

Conforme a la norma EN 71 y ASTM F963-17.